El electromagnetismo se ocupa de describir los fenómenos físicos macroscópicos en los cuales intervienen cargas eléctricas, tanto en reposo como en movimiento. Queda claro, pues, que no describe fenómenos a escala atómica o molecular; para hacerlo con tal nivel de detalle es preciso recurrir a otras disciplinas, como la mecánica cuántica. Se sabe que las ondas electromagnéticas viajan en el vacío a la velocidad de la luz y que son capaces de transportar energía a través del espacio. La cantidad de energía transportada por una onda electromagnética depende de su frecuencia. Las ondas electromagnéticas emplean ondas electromagnéticas de entre 3 KHz y 300 GHz y un potente campo magnético. Esto les permite crear imágenes detalladas de órganos y tejidos dentro de los seres vivos de manera no invasiva y segura ya que no se debe usar radiación ionizante. El electromagnetismo no solo ha sido crucial en el campo de la ingeniería, también en otros como la medicina, la construcción, la aeronáutica e incluso la biología. Dentro de la medicina cabe destacar la técnica de resonancia magnética, que se basa en las propiedades magnéticas de ciertos núcleos de átomos, como el de hidrógeno. Hoy esta aplicación es clave para el diagnóstico de enfermedades vasculares o musculoesqueléticas.