Urdaibai es una zona natural de la costa vizcaína que fue declarada Reserva de la Biosfera en 1984.
Allí, entre los bosques y la brisa marina, se encuentra el Caserío de la Granja Escuela Baratze.
Evelyn Segura nos enseña los animales que allí residen y las curiosidades de cada uno de ellos.
La esencia de esta granja reside en enseñar a los más pequeños el amor y respeto por la fauna que hace miles de años el ser humano logró que se quedaran a su lado: los animales de granja.
Estar en contacto con ellos, con las plantas y con la naturaleza en sí, es un valor que debe ser transmitido desde que somos niños.
Bautizamos a Brava, una burrita recién nacida.
Los burros y otro tipo de equinos, tienden a levantarse muy rápido tras su parto debido a un miedo ancestral.
Tienen guardados en sus genes la posibilidad de peligro y ser devorados por un depredador, se trata de un mecanismo de defensa.
Los burros: animales con un instinto muy desarrollado.
Visitamos los establos y nos encontramos con los caballos.
Sobre ellos se dice que son los animales más peligrosos de la granja.
Pero no porque sean un peligro en sí.
Esta mala fama se debe a sus dientes y la potente dentadura que poseen.
Las vacas son unos animales muy sensitivos: su humor cambia cuando saben que se avecina una tormenta.
Además, tal y como nos cuenta Evelyn, su dentadura no tiene incisivos en la mandíbula superior pero sí en la inferior.
A pesar de ello, tienen molares en ambas partes.
Que ahora predomine esto color entre los rebaños se debe a la obra del ser humano: quisimos reproducir las de pelaje blanco debido a que es más fácil teñir su lana.
Y, por último, el animal favorito de Evelyn Segura en la granja… ¡el cerdo.
Aunque protagonicen escenas donde se les ve rodeados de barro, se tratan de los animales más limpios de la granja y son muy inteligentes.